Talált 115 Eredmények: príncipes

  • Trata a sus jefes como a Oreb y a Zeeb, y a sus príncipes como a Zebá y a Salmaná, (Salmos 83, 12)

  • con pleno poder para instruir a los príncipes y enseñar sabiduría a los ancianos. (Salmos 105, 22)

  • el que cubre de vergüenza a los príncipes y los extravía por un desierto sin huellas, (Salmos 107, 40)

  • Sus príncipes cayeron despeñados, esos que se complacían en oírme decir: (Salmos 141, 6)

  • Los reyes de la tierra y todas las naciones, los príncipes y los gobernantes de la tierra; (Salmos 148, 11)

  • en la gran asamblea de los sacerdotes, del pueblo, de los príncipes de la nación y de los ancianos del país, se nos ha notificado lo siguiente: (I Macabeos 14, 28)

  • por mí gobiernan los príncipes y los nobles juzgan la tierra. (Proverbios 8, 16)

  • No le sienta bien al insensato una vida confortable, ¡cuánto menos a un esclavo gobernar a los príncipes! (Proverbios 19, 10)

  • No es propio de los reyes, Lemuel, no es propio de los reyes beber vino, ni de los príncipes desear bebidas fuertes, (Proverbios 31, 4)

  • Yo vi esclavos montados a caballo y príncipes de a pie, como los esclavos. (Eclesiastés 10, 7)

  • ¡Ay de ti, nación, si tu rey es un joven y tus príncipes comen desde la mañana! (Eclesiastés 10, 16)

  • ¡Feliz de ti, nación, si tienes por rey a un noble de nacimiento, y tus príncipes comen cuando es debido, para reparar sus fuerzas y no para embriagarse! (Eclesiastés 10, 17)


“Há duas razões principais para se orar com muita satisfação: primeiro para render a Deus a honra e a glória que Lhe são devidas. Segundo, para falar com São Padre Pio de Pietrelcina