Talált 218 Eredmények: culto a ídolos

  • Pero Yavé ha ordenado respecto a ti: No habrá más descendencia de tu nombre; de la casa de tu Dios extirparé ídolos y estatuas fundidas y haré de tu sepulcro un lugar maldito. (Nahún 1, 14)

  • En esos días, dice Yavé, arrancaré del país hasta el nombre de los ídolos para que nunca más se los mencione; echaré además a los profetas con sus espíritus impuros. (Zacarías 13, 2)

  • El culto que me rinden no sirve de nada, las doctrinas que enseñan no son más que mandatos de hombres.» (Evangelio según San Mateo 15, 9)

  • El culto que me rinden de nada sirve; las doctrinas que enseñan no son más que mandatos de hombres. (Evangelio según San Marcos 7, 7)

  • Pero yo pediré cuentas a la nación a la que sirvan como esclavos. Después saldrán y me darán culto en este lugar. (Hecho de los Apóstoles 7, 7)

  • Felipe se levantó y se puso en camino. Y justamente pasó un etíope, un eunuco de Candaces, reina de Etiopía, un alto funcionario al que la reina encargaba la administración de su tesoro. Había ido a Jerusalén a rendir culto a Dios, (Hecho de los Apóstoles 8, 27)

  • Un día, mientras celebraban el culto del Señor y ayunaban, el Espíritu Santo les dijo: «Sepárenme a Bernabé y a Saulo y envíenlos a realizar la misión para la que los he llamado.» (Hecho de los Apóstoles 13, 2)

  • Digámosles en nuestra carta tan sólo que se abstengan de lo que es impuro por haber sido ofrecido a los ídolos, de las relaciones sexuales prohibidas, de la carne de animales sin sangrar y de comer sangre. (Hecho de los Apóstoles 15, 20)

  • que no coman carne sacrificada a los ídolos, ni sangre, ni carne de animales sin desangrar, y que se abstengan de relaciones sexuales prohibidas. Observen estas normas dejándose guiar por el Espíritu Santo. Adiós. » (Hecho de los Apóstoles 15, 29)

  • Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu hervía viendo la ciudad plagada de ídolos. (Hecho de los Apóstoles 17, 16)

  • En cuanto a los creyentes de origen no judío, ya les hemos enviado instrucciones, pidiéndoles que se abstengan de carne sacrificada a los ídolos, de la sangre y de la carne de animales sin sangrar y de las relaciones sexuales prohibidas.» (Hecho de los Apóstoles 21, 25)

  • de hecho, el culto perpetuo que nuestras doce tribus rinden a Dios noche y día no tiene otro propósito que el de alcanzar esta promesa. Por esta esperanza, oh rey, me acusan los judíos. (Hecho de los Apóstoles 26, 7)


“O amor nada mais é do que o brilho de Deus nos homens”. São Padre Pio de Pietrelcina