Talált 306 Eredmények: animal muerto encontrado
Con solo verlos, antes de ser atacados, se habrían muerto de espanto. (Sabiduría 11, 19)
a no ser que represente a un vulgar animal. Lo pinta de rojo, habiendo antes recubierto con pasta todos los defectos. (Sabiduría 13, 14)
Aunque no hubiera nada que temer, el simple paso de un animal o el silbido de una serpiente bastaba para aterrorizarlos; se morían en convulsiones de miedo, no atreviéndose a mirar ese aire que nos rodea y del cual nadie podría huir. (Sabiduría 17, 9)
Si has encontrado un nuevo amigo, comienza por ponerlo a prueba, no le otorgues demasiado pronto tu confianza. (Sirácides (Eclesiástico) 6, 7)
Un amigo fiel es un refugio seguro; el que lo halla ha encontrado un tesoro. ¿Qué no daría uno por un amigo fiel? ¡No tiene precio! (Sirácides (Eclesiástico) 6, 14)
Que se alargue la enfermedad, bromea el médico... el rey de hoy estará muerto mañana. (Sirácides (Eclesiástico) 10, 10)
Una vez muerto, el hombre no tiene ante sí más que la podredumbre, las fieras y los gusanos. (Sirácides (Eclesiástico) 10, 11)
Todo animal frecuenta a los de su especie, también el hombre busca a su semejante. (Sirácides (Eclesiástico) 13, 16)
El muerto no puede alabar, es como si no existiera; es el vivo, el que está sano, el que alaba al Señor. (Sirácides (Eclesiástico) 17, 28)
Instruir a un tonto es como pegar de nuevo un cántaro roto o despertar a un hombre muerto de sueño. (Sirácides (Eclesiástico) 22, 9)
Llora por un muerto: perdió la luz; llora por un tonto: perdió el espíritu. Laméntate menos por un muerto, porque encontró el descanso, pero la vida de un tonto es peor que la muerte. (Sirácides (Eclesiástico) 22, 11)
Por un muerto son siete días de duelo, pero por el tonto y el impío, son todos los días de su vida. (Sirácides (Eclesiástico) 22, 12)