2. Pero, después, la mujer de Galaad le dio hijos y, al crecer éstos, echaron a Jefté diciéndole: «Tú no tendrás parte ni herencia en la casa de nuestro padre, porque eres hijo de otra mujer.»





“Rezai e continuai a rezar para não ficardes entorpecidos”. São Padre Pio de Pietrelcina