14. Tengan, pues, temor a Yavé, y sean cumplidores y fieles en servirlo. Dejen a un lado esos dioses que sus padres adoraron en Mesopotamia y en Egipto, y sirvan sólo a Yavé.





“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina