1. ¡Aleluya! Siervos del Señor, alabadlo, alabad el nombre del Señor.

2. Bendito sea el nombre del Señor desde ahora y por siempre;

3. desde que sale el sol hasta su ocaso, alabado sea el nombre del Señor.

4. El Señor domina sobre las naciones, su gloria por encima de los cielos.

5. ¿Quién es como el Señor, nuestro Dios, que se sienta en lo alto,

6. y se rebaja para ver los cielos y la tierra?

7. Él levanta del polvo al indigente y saca al pobre del estiércol,

8. para sentarlo con los príncipes, con los príncipes de su pueblo;

9. instala a la estéril en su casa, madre gozosa de toda la familia.





“Menosprezai vossas tentações e não vos demoreis nelas. Imaginai estar na presença de Jesus. O crucificado se lança em vossos braços e mora no vosso coração. Beijai-Lhe a chaga do lado, dizendo: ‘Aqui está minha esperança; a fonte viva da minha felicidade. Seguro-vos, ó Jesus, e não me aparto de vós, até que me tenhais posto a salvo’”. São Padre Pio de Pietrelcina