13. Porque todo primogénito me pertenece. El día en que herí a todos los primogénitos de Egipto, consagré para mí a todos los primogénitos de Israel, tanto de hombre como de ganado. Son para mí. Yo, Yahveh.»





“O homem sem Deus é um ser mutilado”. São Padre Pio de Pietrelcina