Sirácides (Eclesiástico), 37
22. Otro es sabio a sus propios ojos; él mismo afirma que su sabiduría es provechosa.
22. Otro es sabio a sus propios ojos; él mismo afirma que su sabiduría es provechosa.
“Quando te encontrares diante de Deus, na oração considera-te banhado na luz da verdade, fala-lhe se puderes, deixa simplesmente que te veja e não tenhas preocupação alguma”. São Padre Pio de Pietrelcina