29. Los agasajos y los regalos ciegan los ojos de los sabios. Es un bozal que impide que las críticas salgan de su boca.





“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina