Sirácides (Eclesiástico), 16
9. No tuvo compasión de esa nación condenada a la destrucción: fueron aniquilados a causa de sus pecados.
9. No tuvo compasión de esa nación condenada a la destrucción: fueron aniquilados a causa de sus pecados.
“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina