Job, 31
34. ¿Acaso debí temer al rumor público hasta quedarme callado y encerrado en mi casa?
34. ¿Acaso debí temer al rumor público hasta quedarme callado y encerrado en mi casa?
“Que Jesus o mergulhe no esplendor da Sua imortal juventude.” São Padre Pio de Pietrelcina