12. Cuando ustedes celebran sus comidas fraternales, ellos lo echan todo a perder. Comen como sinvergüenzas sin otra preocupación que la de su propio estómago. Son como nubes llevadas por el viento y que nunca traen la lluvia, como árboles de fines de otoño en los que no se encuentran frutos, dos veces muertos.





“Uma Missa bem assistida em vida será mais útil à sua salvação do que tantas outras que mandarem celebrar por você após sua morte!” São Padre Pio de Pietrelcina