II Crónicas, 29
29. Cuando se terminó de ofrecer el holocausto, el rey y todos los que lo acompañaban, doblaron sus rodillas y se postraron.
29. Cuando se terminó de ofrecer el holocausto, el rey y todos los que lo acompañaban, doblaron sus rodillas y se postraron.
“Que Jesus reine sempre soberano no seu coração e o faça cada vez mais digno de seus divinos dons.” São Padre Pio de Pietrelcina