I Crónicas, 6
33. Sus hermanos, los levitas, estaban encargados de todo el servicio de la Morada de la Casa de Dios.
33. Sus hermanos, los levitas, estaban encargados de todo el servicio de la Morada de la Casa de Dios.
“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina