25. David dijo al mensajero: «Trata de reanimar a Joab con este mensaje mío: No te aflijas por este asunto, porque la espada devora hoy a unos y al día siguiente a otros. Refuerza tu ataque contra la ciudad y destrúyela. Así tú le darás ánimo.»





“O meu passado, Senhor, à Tua misericórdia. O meu Presente, ao Teu amor. O meu futuro, à Tua Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina