13. Bagoas fue adonde estaba Judit, y le dijo: "Que esta hermosa joven no se niegue a venir donde mi señor, para ser agasajada por él, beber con nosotros el vino que causa alegría y ser como una de las mujeres asirias, que viven en el palacio de Nabucodonosor".





“Pode-se manter a paz de espírito mesmo no meio das tempestades da vida”. São Padre Pio de Pietrelcina