Löydetty 97 Tulokset: derechos de la viuda

  • Judá dijo a Onán: "Cásate con la viuda de tu hermano, cumpliendo con ella tu deber de cuñado, y suscita descendencia a tu hermano". (Génesis 38, 8)

  • Onán sabía que los hijos no serían suyos, y cada vez que se unía a la viuda de su hermano derramaba en tierra el semen para no dar hijos a su hermano. (Génesis 38, 9)

  • Entonces Judá dijo a su nuera: "Vuelve como viuda a la casa de tu padre, hasta que se haga mayor mi hijo Selá". Él se decía: "No sea que muera también él como sus hermanos". Tamar volvió a casa de su padre. (Génesis 38, 11)

  • Entonces ella se quitó sus vestidos de viuda, se cubrió con un velo y, disfrazada, se sentó a la entrada de Enáyim, junto al camino de Timná, pues veía que Selá había crecido y no se había casado con ella. (Génesis 38, 14)

  • Luego ella se levantó y se fue. Se quitó el velo y volvió a ponerse la ropa de viuda. (Génesis 38, 19)

  • Pero si la destina para su hijo, la tratará según los derechos de los hijos. (Exodo 21, 9)

  • No maltratarás a la viuda ni al huérfano. (Exodo 22, 21)

  • Harás para el tabernáculo unos tablones de madera de acacia, y los colocarás bien derechos. (Exodo 26, 15)

  • Luego lo inmolas, tomas de su sangre y untas con ella la ternilla de la oreja derecha de Aarón y de sus hijos, y el dedo pulgar de sus manos derechas y el de sus pies derechos, y rocías el altar todo alrededor. (Exodo 29, 20)

  • El sacerdote hará sobre él el rito de absolución por el pecado cometido en una de las materias dichas, y éste le será perdonado. El sacerdote tendrá en este caso los mismos derechos que en el caso de las ofrendas". (Levítico 5, 13)

  • "Si un individuo comete un sacrificio pecando por inadvertencia contra los derechos sagrados del Señor, presentará al Señor, como sacrificio de reparación, un carnero del ganado sin defecto, valorado y calculado en plata, según la tasa oficial del templo. (Levítico 5, 15)

  • No tomará ni viuda ni divorciada, ni violada ni prostituta; una virgen de su pueblo será su mujer. (Levítico 21, 14)


“Procuremos servir ao Senhor com todo o coração e com toda a vontade. Ele nos dará sempre mais do que merecemos.” São Padre Pio de Pietrelcina