Löydetty 97 Tulokset: derechos de la viuda

  • pero si es viuda o divorciada y no tiene hijos y vuelve a casa de su padre como estaba durante la juventud, podrá comer el alimento de su padre. Pero ningún extraño lo podrá comer. (Levítico 22, 13)

  • El voto de una viuda o de una divorciada y todos los compromisos por ellas contraídos son válidos. (Números 30, 10)

  • Hace justicia al huérfano y a la viuda, ama al emigrante suministrándole pan y vestido. (Deuteronomio 10, 18)

  • Allí vendrá el levita, que no tiene parte ni herencia como tú; el inmigrante, el huérfano y la viuda de tu ciudad, y comerán hasta saciarse. Así el Señor, tu Dios, te bendecirá en todas tus empresas. (Deuteronomio 14, 29)

  • En presencia del Señor, tu Dios, en el lugar elegido por él para hacer habitar su nombre, allí te regocijarás tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, el levita, el extranjero, el huérfano y la viuda que viven en tu ciudad. (Deuteronomio 16, 11)

  • Te regocijarás en tu fiesta tú, tu hijo y tu hija, tu siervo y tu sierva, el levita y el extranjero, el huérfano y la viuda que viven en tus ciudades. (Deuteronomio 16, 14)

  • Éstos son los derechos de los sacerdotes sobre el pueblo, sobre los que ofrecen un sacrificio de ganado mayor o menor: se dará al sacerdote la pierna, la mandíbula y el cuajar, (Deuteronomio 18, 3)

  • No violes el derecho del emigrante, ni el del huérfano, ni tomes en prenda los vestidos de la viuda. (Deuteronomio 24, 17)

  • Cuando hagas la recolección en tu campo, si olvidas en él una gavilla, no vuelvas a buscarla. Déjala para el emigrante, el huérfano y la viuda, para que el Señor, tu Dios, te bendiga en todas tus empresas. (Deuteronomio 24, 19)

  • Cuando sacudas tus olivos, no vuelvas al rebusco de aceitunas; déjalas para el emigrante, el huérfano o la viuda. (Deuteronomio 24, 20)

  • Cuando vendimies tu viña, no vuelvas a la rebusca; déjalo para el emigrante, el huérfano y la viuda. (Deuteronomio 24, 21)

  • Si dos hermanos viven juntos y uno de ellos muere sin hijos, la viuda no se casará con un extraño. Su cuñado se casará con ella, cumpliendo sus deberes de cuñado; (Deuteronomio 25, 5)


“Jesus e a sua alma devem cultivar a vinha de comum acordo.” São Padre Pio de Pietrelcina