Löydetty 227 Tulokset: trono blanco

  • Pero si el sacerdote ve que no hay en ella pelo blanco, ni está más hundida que la piel, y que ha perdido color, le recluirá por siete días. (Levítico 13, 21)

  • Cuando en la piel de alguien hay una quemadura, y sobre la quemadura se forma una mancha de color blanco rojizo o sólo blanco, (Levítico 13, 24)

  • el sacerdote la examinará; y si el pelo se ha vuelto blanco en la mancha blanca y ésta aparece más hundida que la piel, es que se ha producido lepra en la quemadura. El sacerdote lo declarará impuro; es un caso de lepra. (Levítico 13, 25)

  • Si, en cambio, el sacerdote observa que en la mancha no aparece pelo blanco, que no está más hundida que la piel y que ha perdido color, lo recluirá siete días. (Levítico 13, 26)

  • el sacerdote las examinará; si comprueba que las manchas de la piel son de color blanco, se trata de un eccema que ha brotado en la piel; esta persona es pura. (Levítico 13, 39)

  • El sacerdote la examinará y si la hinchazón de la llaga en la parte calva es de color blanco rojizo, con aspecto de lepra en la piel, (Levítico 13, 43)

  • Cuando suba al trono real, deberá escribir esta Ley para su uso, copiándola del libro de los sacerdotes levitas. (Deuteronomio 17, 18)

  • Levanta del polvo al humilde, alza del muladar al indigente para hacerle sentar junto a los nobles, y darle en heredad trono de gloria, pues de Yahveh los pilares de la tierra y sobre ellos ha sentado el universo. (I Samuel 2, 8)

  • Estaba Samuel ofreciendo el holocausto, cuando los filisteos presentaron batalla a Israel, pero tronó Yahveh aquel día con gran estruendo sobre los filisteos, los llenó de terror y fueron batidos ante Israel. (I Samuel 7, 10)

  • Ese mismo día iré a lanzar flechas por esa parte, como para tirar al blanco. (I Samuel 20, 20)

  • que quitaría la realeza a la casa de Saúl y levantaría el trono de David sobre Israel y sobre Judá, desde Dan hasta Berseba.» (II Samuel 3, 10)

  • Y cuando tus días se hayan cumplido y te acuestes con tus padres, afirmaré después de ti la descendencia que saldrá de tus entrañas, y consolidaré el trono de su realeza. (II Samuel 7, 12)


“O amor nada mais é do que o brilho de Deus nos homens”. São Padre Pio de Pietrelcina