Löydetty 80 Tulokset: pondré
les dirás: Así dice el Señor Yahveh: He aquí que voy a tomar el leño de José (que está en la mano de Efraím) y las tribus de Israel que están con él, los pondré junto al leño de Judá, haré de todo un solo leño, y serán una sola cosa en mi mano. (Ezequiel 37, 19)
Concluiré con ellos una alianza de paz, que será para ellos una alianza eterna. Los estableceré, los multiplicaré y pondré mi santuario en medio de ellos para siempre. (Ezequiel 37, 26)
Yo te haré dar media vuelta, te pondré garfios en las quijadas, y te haré salir con todo tu ejército, caballos y caballeros, todos bien equipados, inmensa asamblea, todos con escudos y paveses, y diestros en el manejo de la espada. (Ezequiel 38, 4)
Así manifestaré yo mi gloria entre las naciones, y todas las naciones verán el juicio que voy a ejecutar y la mano que pondré sobre ellos. (Ezequiel 39, 21)
Yahveh le dijo: «Ponle el nombre de Yizreel, porque dentro de poco visitaré yo la casa de Jehú por la sangre derramada en Yizreel, y pondré fin al reinado de la casa de Israel. (Oseas 1, 4)
Trocaré en duelo vuestra fiesta, y en elegía todas vuestras canciones; en todos los lomos pondré sayal y tonsura en todas las cabezas; lo haré como duelo de hijo único y su final como día de amargura. (Amós 8, 10)
si van al cautiverio delante de sus enemigos, allí ordenaré a la espada que los mate; pondré en ellos mis ojos para mal y no para bien. (Amós 9, 4)
«Voy a hacer de Samaria una ruina de campo, un plantío de viñas. Haré rodar sus piedras por el valle, pondré al desnudo sus cimientos. (Miqueas 1, 6)
Arrojaré inmundicia sobre ti, te deshonraré y te pondré como espectáculo. (Nahún 3, 6)
En mi puesto de guardia me pondré, me plantaré en mi muro, y otearé para ver lo que él me dice, lo que responde a mi querella. (Habacuc 2, 1)
Yo pondré a los hombres en aprieto, y ellos como ciegos andarán, (porque pecaron contra Yahveh); su sangre será derramada como polvo, y su carne como excremento. (Sofonías 1, 17)
Aquel día - oráculo de Yahveh Sebaot - te tomaré a ti, Zorobabel, hijo de Sealtiel, siervo mío - oráculo de Yahveh - y te pondré como anillo de sello, porque a ti te he elegido, oráculo de Yahveh Sebaot. (Ageo 2, 23)