Löydetty 37 Tulokset: dejaré
Dejaré la casa de Ajab como la casa de Jeroboam, hijo de Nebat, y como la casa de Basá, hijo de Ajías. (II Reyes 9, 9)
Gracias a ella tendré la inmortalidad y dejaré recuerdo eterno a los que después de mí vengan. (Sabiduría 8, 13)
Aún derramaré la enseñanza como profecía, la dejaré por generaciones de siglos. (Eclesiástico 24, 33)
Pero la nación que someta su cerviz al yugo de Babilonia y le sirva, yo la dejaré tranquila en su suelo - oráculo de Yahveh - y lo labrará y morará en él.» (Jeremías 27, 11)
me dejaré encontrar de vosotros (- oráculo de Yahveh -; devolveré vuestros cautivos, os recogeré de todas las naciones y lugares a donde os arrojé - oráculo de Yahveh - y os haré tornar al sitio de donde os hice que fueseis desterrados). (Jeremías 29, 14)
pues contigo estoy yo - oráculo de Yahveh - para salvarte: pues acabaré con todas las naciones entre las cuales te dispersé. pero contigo no acabaré; aunque sí te corregiré como conviene, ya que impune no te dejaré. (Jeremías 30, 11)
Tú no temas, siervo mío Jacob, - oráculo de Yahveh - que contigo estoy yo, pues acabaré con todas las naciones adonde te empujé, pero contigo no acabaré; aunque sí te corregiré como conviene, ya que impune no te dejaré. (Jeremías 46, 28)
Sin embargo, dejaré que un pequeño número de ellos escapen a la espada, al hambre y a la peste, para que cuenten todas sus abominaciones entre las naciones adonde vayan, a fin de que sepan que yo soy Yahveh. (Ezequiel 12, 16)
Hijo de hombre, habla a los ancianos de Israel. Les dirás: Así dice el Señor Yahveh: ¿A consultarme venís? Por mi vida, que no me dejaré consultar por vosotros, oráculo del Señor Yahveh. (Ezequiel 20, 3)
presentando vuestras ofrendas, haciendo pasar a vuestros hijos por el fuego; os contamináis con todas vuestras basuras, hasta el día de hoy, ¿y yo voy a dejarme consultar por vosotros, casa de Israel? Por mi vida, oráculo del Señor Yahveh, que no me dejaré consultar por vosotros. (Ezequiel 20, 31)
Derruirán las murallas de Tiro y abatirán sus torres. Yo barreré de ella hasta el polvo y la dejaré como roca pelada. (Ezequiel 26, 4)
Yo dejaré secos los Nilos, y venderé el país en manos de malvados. Devastaré el país y todo lo que encierra, por mano de extranjeros. Yo, Yahveh, he hablado. (Ezequiel 30, 12)