Löydetty 47 Tulokset: Rebaños

  • ¿Tienes rebaños? Pásales revista; y si te dan ganancia, consérvalos. (Eclesiástico 7, 22)

  • porque el alcázar habrá sido abandonado, el genio de la ciudad habrá desaparecido; Ofel y el Torreón quedarán en adelante vacíos por siempre, para delicia de asnos y pastizal de rebaños. (Isaías 32, 14)

  • Vendrán extranjeros y apacentarán vuestros rebaños, e hijos de extraños serán vuestros labradores y viñadores. (Isaías 61, 5)

  • A ella vienen pastores con sus rebaños, han montado las tiendas, junto a ella en derredor, y apacientan cada cual su manada. (Jeremías 6, 3)

  • Así pues, oíd la decisión que Yahveh ha tomado sobre Edom y sus planes sobre los moradores de Temán. Juro que les han de llevar a rastras las crías de los rebaños, que asolarán sobre ellos sus pastizales. (Jeremías 49, 20)

  • Sus tiendas y rebaños serán tomados; sus toldos y todo su ajuar y sus camellos les serán arrebatados, y a ellos se les llamará «Terror por doquier». (Jeremías 49, 29)

  • Así pues, oíd la decisión que Yahveh ha tomado sobre Babilonia y sus planes sobre el país de los caldeos. Juro que les han de llevar a rastras las crías de los rebaños, que asolarán sobre ellos sus pastizales. (Jeremías 50, 45)

  • Huyó Jacob a la campiña de Aram, sirvió Israel por una mujer, por una mujer guardó rebaños. (Oseas 12, 13)

  • ¡Cómo muge el ganado, cómo vagan sin rumbo los rebaños de vacas, porque no hay pastor para ellos! ¡Hasta los rebaños de ovejas tienen que expiar! (Joel 1, 18)

  • Será entonces el Resto de Jacob entre las naciones, en medio de pueblos numerosos, como león entre las bestias de la selva, como leoncillo entre los rebaños de ganado menor, que si pasa, pisotea, y si desgarra, no hay quien libre. (Miqueas 5, 7)

  • Se tumbarán en medio de ella los rebaños, toda suerte de animales: hasta el pelícano, hasta el erizo, pasarán la noche entre sus capiteles. El búho cantará en la ventana, y el cuervo en el umbral, porque el cedro fue arrancado. (Sofonías 2, 14)


“O Santo Sacrifício da Missa é o sufrágio mais eficaz, que ultrapassa todas as orações, as boas obras e as penitências. Infalivelmente produz seu efeito para vantagem das almas por sua virtude própria e imediata.” São Padre Pio de Pietrelcina