Löydetty 93 Tulokset: oración

  • En una ocasión, Pedro y Juan subían al Templo para la oración de la tarde. (Hechos 3, 1)

  • De esa manera, podremos dedicarnos a la oración y al ministerio de la Palabra». (Hechos 6, 4)

  • y me dijo: "Cornelio, tu oración ha sido escuchada y Dios se ha acordado de tus limosnas. (Hechos 10, 31)

  • Y al advertir lo que le había sucedido, se dirigió a la casa de María, la madre de Juan, llamado Marcos, donde un grupo numeroso se hallaba reunido en oración. (Hechos 12, 12)

  • En cada comunidad establecieron presbíteros, y con oración y ayuno, los encomendaron al Señor en el que habían creído. (Hechos 14, 23)

  • Un día, mientras nos dirigíamos al lugar de oración, nos salió al encuentro una muchacha poseída de un espíritu de adivinación, que daba mucha ganancia a sus patrones adivinando la suerte. (Hechos 16, 16)

  • Hermanos, mi mayor deseo y lo que pido en mi oración a Dios es que ellos se salven. (Romanos 10, 1)

  • Alégrense en la esperanza, sean pacientes en la tribulación y perseverantes en la oración. (Romanos 12, 12)

  • No se nieguen el uno al otro, a no ser de común acuerdo y por algún tiempo, a fin de poder dedicarse con más intensidad a la oración; después vuelvan a vivir como antes, para que Satanás no se aproveche de la incontinencia de ustedes y los tiente. (I Corintios 7, 5)

  • Ustedes también nos ayudarán con su oración, y de esa manera, siendo muchos los que interceden por nosotros, también serán muchos los que darán gracias por el beneficio recibido. (II Corintios 1, 11)

  • Y la oración que ellos harán por ustedes pondrá de manifiesto el cariño que les profesan, a causa de la gracia sobreabundante que Dios derramó sobre ustedes. (II Corintios 9, 14)

  • Sí, nosotros nos regocijamos de ser débiles, con tal de que ustedes sean fuertes. Lo que pedimos en nuestra oración es que lleguen a ser perfectos. (II Corintios 13, 9)


“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina