Löydetty 1807 Tulokset: eso

  • y con ella sus dos hijos.Uno de esos hijos se llamaba Guersón,(pues su padre dijo: He estado peregrino en tierra extraña); (Exodo 18, 3)

  • Moisés salió al encuentro de su suegro, le hizo una profunda reverencia y lo besó. Se preguntaron el uno al otro acerca de su salud y entraron en la tienda. (Exodo 18, 7)

  • No te postres ante esos dioses, ni les sirvas, porque yo, Yavé, tu Dios, soy un Dios celoso. yo pido cuentas a hijos, nietos y biznietos por la maldad de sus padres que no me quisieron. (Exodo 20, 5)

  • Pues en seis días Yavé hizo el cielo y la tierra, el mar y cuanto hay en ellos, y el séptimo día descansó. Por eso bendijo el Sábado y lo hizo sagrado. (Exodo 20, 11)

  • Con eso, todos tus varones se presentarán tres veces al año delante de Yavé, tu Señor. (Exodo 23, 17)

  • No habitarán en tu tierra, no sea que te lleven a servir sus dioses y a pecar contra mí: eso sería tu ruina. (Exodo 23, 33)

  • Propondrás este trabajo a todos esos hombres expertos a los cuales he llenado yo del espíritu de inteligencia. Harán las vestiduras de Aarón para que sea consagrado como sacerdote mío. (Exodo 28, 3)

  • Para eso se emplearán oro, jacinto, púrpura, y grana dos veces teñida y lino fino. (Exodo 28, 5)

  • Cada uno de los que sean empadronados pagará medio siclo, según el peso del templo (es decir, un siclo de veinte óbolos). Este medio siclo será la ofrenda para Yavé. (Exodo 30, 13)

  • Entonces Moisés dijo a los levitas: «Ustedes hoy acaban de ser consagrados a Yavé con sangre, tal vez con la sangre de un hijo o de un hermano. Por eso hoy él les da la bendición.» (Exodo 32, 29)

  • Por eso, todos los artesanos que trabajaban en la construcción del Santuario, además de su propio trabajo, (Exodo 36, 4)

  • la plata entregada por los hombres incluidos en el censo de la comunidad fue de cien talentos y mil setecientos sesenta y cinco siclos, según el peso del Santuario. (Exodo 38, 25)


“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina