Löydetty 129 Tulokset: entrego
Por otra parte, eres testigo del juramento de Ragüel, que no puedo quebrantar.» Rafael salió para Ragués de Media y se hospedó en casa de Gabael. Le presentó el recibo y Gabael le entregó todos los sacos de dinero que estaban sellados. (Tobías 9, 5)
Entonces Ragüel le entregó a su esposa Sara y la mitad de todos sus bienes: bueyes, carneros, burros, camellos, ropas, plata y utensilios, (Tobías 10, 10)
Llenó una bolsa con harina de cebada, tortas de higos y panes puros, lo envolvió todo y se lo entregó a su sierva, junto con un cuero lleno de vino y un cántaro de aceite. (Judit 10, 5)
Después hizo rodar el cuerpo lejos del lecho y arrancó las cortinas de las columnas. En seguida salió y entregó la cabeza de Holofernes a su sirvienta, (Judit 13, 9)
El rey se sacó el anillo de su mano y se lo entregó a Amán, el perseguidor de los judíos, con estas palabras: «¡Quédate con tu plata! (Ester 3, 10)
Le entregó, después, una copia de la condenación a muerte de los judíos, que había sido publicada en Susa, para que se la pasara a Ester y ésta la leyera. También le pedía a Ester que fuera a hablar con el rey para interceder por su pueblo y conseguir la revocación del edicto. «Acuérdate, le decía, de cuando vivías humildemente y de que yo te daba de comer con mi mano. Pues has de saber que Amán, el segundo del reino, le ha pedido al rey que nos condene a muerte. Invoca al Señor, habla por nosotros al rey, líbranos de la muerte.» (Ester 4, 8)
Si tus hijos pecaron contra él, él ya los entregó en manos de su maldad. (Job 8, 4)
esos hombres a os que se entregó el país, antes que pasara ningún extranjero. (Job 15, 19)
Entregó sus cosechas al pulgón y el fruto de su trabajo a las langostas. (Salmos 78, 46)
Le dio rienda suelta a su cólera, no preservó sus vidas de la muerte y entregó sus personas a la peste. (Salmos 78, 50)
Tanto era su enojo con los suyos que entregó su pueblo a la espada; (Salmos 78, 62)
Los entregó en manos de los paganos y los que los odiaban los dominaron. (Salmos 106, 41)