Löydetty 125 Tulokset: Cortinas de Lino Fino

  • Sobre el altar de oro extenderán un paño de púrpura. Lo cubrirán con una cubierta de cuero fino, y le pondrán las varas. (Números 4, 11)

  • Tomarán luego todos los vasos que se empleen en el servicio del santuario, los pondrán en un paño de púrpura, los cubrirán con una cubierta de cuero fino y los colocarán sobre las angarillas. (Números 4, 12)

  • Pondrán encima todos los utensilios para su servicio: los braseros, tenedores, palas y platos; extenderán sobre él una cubierta de cuero fino y le pondrán las varas. (Números 4, 14)

  • llevarán las cortinas de la Morada y de la Tienda de las Citas, el toldo y la capa de cuero fino que la cubre por encima y la cortina de la entrada de la Tienda de las Citas, (Números 4, 25)

  • No te vestirás con un paño tejido mitad de lana y mitad de lino. (Deuteronomio 22, 11)

  • La mujer los había escondido en la techumbre de la casa, tapándolos con paquetes de lino que allí guardaba. (Josué 2, 6)

  • Cuando llegaban a Lejí, los filisteos corrieron a su encuentro con gritos de triunfo, pero el espíritu de Yavé vino sobre él: las cuerdas que lo amarraban fueron como hilos de lino quemados al fuego y las ligaduras se deshicieron en sus brazos. (Jueces 15, 14)

  • Hijas de Israel, lloren por Saúl, que las vestía de lino y carmesí, y adornaba con joyas de oro sus vestidos. (2 Samuel 1, 24)

  • David, vestido con un efod de lino, danzaba con todas sus fuerzas en presencia de Yavé. (2 Samuel 6, 14)

  • tenía diez metros de largo, diez de ancho y diez de alto, y estaba cubierto de oro fino. (1 Reyes 6, 20)

  • los candeleros de oro fino, cinco a la derecha y cinco a la izquierda, delante del «Lugar Santísimo»; las flores, las campanas y las despabiladeras de oro (tijeras para arreglar la luz de las velas) ; (1 Reyes 7, 49)

  • las cucharas, los cuchillos y los calderos pequeños, las copas y los braseros de oro fino, las bisagras de oro para las puertas del «Lugar Santísimo» y del Templo. (1 Reyes 7, 50)


“Quando o dia seguinte chegar, ele também será chamado de hoje e, então, você pensará nele. Tenha sempre muita confiança na Divina Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina