23. Los levitas, cabezas de familia, fueron inscritos en el libro de las Crónicas; pero sólo hasta la época de Yojanán, nieto de Eliasib.





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina