48. Cuando el filisteo se puso en movimiento y avanzó contra David, éste salió corriendo del campamento al encuentro del filisteo;





“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina