37. Sobre cada elefante, como defensa, iba montada una torre sólida de madera, bien protegida y sujeta con cinchas; y en cada torre tres hombres valientes, además del indio que lo guiaba.





“A mulher forte é a que tem temor de Deus, a que mesmo à custa de sacrifício faz a vontade de Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina