14. Además, el rey Ciro mandó sacar del templo de Babilonia los utensilios de oro y plata del templo de Dios, que Nabucodonosor se había llevado del templo de Jerusalén para ponerlos en el templo de Babilonia, y se los entregó a un hombre llamado Sesbasar, a quien había nombrado gobernador.





“Deus quer que as suas misérias sejam o trono da Sua misericórdia.” São Padre Pio de Pietrelcina