Habacuc, 2
20. Mas Yahveh está en su santo Templo: ¡silencio ante él, tierra entera!
20. Mas Yahveh está en su santo Templo: ¡silencio ante él, tierra entera!
El capítulo 2 de Habacuc comienza con el profeta gritando a Dios en relación con la injusticia y el mal que ve a su alrededor. Dios responde y dice que castigará a los opresores y que prevalecerá la justicia. Entonces Habacuc recibe la instrucción de escribir una visión que se cumplirá en el momento adecuado. El capítulo continúa describiendo la arrogancia y la codicia de quienes son juzgados por Dios. A continuación hay cinco versos relacionados con los temas tratados en Habacuc 2:
Proverbios 16:18: "El orgullo precede a la ruina; el espíritu arrogante, la caída". Este versículo habla sobre la caída de aquellos que se vuelven arrogantes y piensan que son superiores a los demás. Esto está relacionado con el tema de Habacuc 2 porque las personas que se juzgan por Dios se describen como orgullosas y arrogantes.
Ezequiel 18:12: "Oprime a los pobres y necesitados requieren un pago de intereses. No presta con capital, ni acepta intereses. ¡Ciertamente no sobrevivirá! Ha practicado todas estas abominaciones; seguramente morirá, y su sangre caerá sobre a él." Este versículo habla sobre la injusticia de exigir interés exorbitante de los pobres y necesitados. Esto se relaciona con el tema de Habacuc 2 porque las personas que se juzgan por Dios se describen como codiciosas y explotadoras.
Oseas 12:7: "El comerciante tiene escamas falsas en sus manos; le encanta oprimir". Este versículo habla sobre la injusticia de los negocios de trampa para obtener ventaja. Esto se relaciona con el tema de Habacuc 2 porque las personas que se juzgan por Dios se describen como engañosas y trampas.
Isaías 5:8: "¡Ay de aquellos que agregan a casa la casa y reúnen el campo al campo, hasta que no sea más lugar y son los únicos que viven en el país!" Este versículo habla sobre la codicia y la codicia de acumular riqueza y propiedad. Esto está relacionado con el tema de Habacuc 2 porque las personas que se juzgan por Dios se describen como avanzadas y egoístas.
Jeremías 22:17: "Pero tus ojos y tu corazón parecen ver tus ganancias, y los inocentes destruidos y asesinados con crueldad". Este versículo habla sobre la codicia y la falta de consideración para los demás. Esto se relaciona con el tema de Habacuc 2 porque las personas que se juzgan por Dios se describen como crueles e inhumanas.
“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina
