3. Al otro día, cuando se levantaron los asdodeos, vieron que Dagón estaba boca abajo en el suelo, delante del Arca de Yavé. Levantaron a Dagón y lo volvieron a poner en su lugar.





“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina