36. Esto es lo que el Señor exigió de los israelitas en favor de los sacerdotes desde el día de su consagración: es ley perpetua para todas las generaciones.





“O Senhor se comunica conosco à medida que nos libertamos do nosso apego aos sentidos, que sacrificamos nossa vontade própria e que edificamos nossa vida na humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina