Found 157 Results for: propia

  • Por eso les envié profetas para desarraigarlos, y de mi propia boca salió su sentencia de muerte. (Oseas 6, 5)

  • Y ustedes, ¿qué son ustedes para mí, Tiro y Sidón y todos los distritos de Filistea? ¿Tomarán acaso represalias contra mí? Si las quieren tomar, bien pronto volveré estas represalias sobre su propia cabeza. (Joel 4, 4)

  • Es la vergüenza la que has traído sobre tu casa, pues al destruir a tantos pueblos, atentabas contra tu propia vida. (Habacuc 2, 10)

  • Tampoco jures por tu propia cabeza, pues no puedes hacer blanco o negro ni uno solo de tus cabellos. (Evangelio según San Mateo 5, 36)

  • Entonces Jesús les dijo: «Si hay un lugar donde un profeta es despreciado, es en su patria y en su propia familia.» (Evangelio según San Mateo 13, 57)

  • Jesús les dijo: «Si hay un lugar donde un profeta es despreciado, es en su tierra, entre su parentela y en su propia familia.» (Evangelio según San Marcos 6, 4)

  • Y Jesús añadió: «Ustedes dejan tranquilamente a un lado el mandato de Dios para imponer su propia tradición. (Evangelio según San Marcos 7, 9)

  • «Si alguno quiere venir a mí y no se desprende de su padre y madre, de su mujer e hijos, de sus hermanos y hermanas, e incluso de su propia persona, no puede ser discípulo mío. (Evangelio según San Lucas 14, 26)

  • El que no carga con su propia cruz para seguirme luego, no puede ser discípulo mío. (Evangelio según San Lucas 14, 27)

  • Vino a su propia casa, y los suyos no lo recibieron; (Evangelio según San Juan 1, 11)

  • El había afirmado que un profeta no es reconocido en su propia tierra. (Evangelio según San Juan 4, 44)

  • El que haga la voluntad de Dios conocerá si mi doctrina viene de él o si hablo por mi propia cuenta. (Evangelio según San Juan 7, 17)


“Que Maria sempre enfeite sua alma com as flores e o perfume de novas virtudes e coloque a mão materna sobre sua cabeça. Fique sempre e cada vez mais perto de nossa Mãe celeste, pois ela é o mar que deve ser atravessado para se atingir as praias do esplendor eterno no reino do amanhecer.” São Padre Pio de Pietrelcina