Found 50 Results for: promesas

  • «Bendito sea Yavé, que ha dado paz y reposo a su pueblo, Israel, según se lo había prometido; no ha faltado a ninguna de las promesas que hizo por boca de Moisés, su siervo. (1 Reyes 8, 56)

  • A ti te daré diez tribus y a Salomón le dejaré solamente una tribu, para cumplir mis promesas a David y porque Jerusalén es la ciudad que me elegí entre todas las tribus de Israel. (1 Reyes 11, 32)

  • y aun esto es poco a tus ojos, oh Dios, que también haces promesas a mi descendencia para el futuro lejano. Me has mirado como si fuera un hombre distinguido, ¡oh Yavé Dios! (1 Crónicas 17, 17)

  • Así, pues, que no los engañe Ezequías ni los seduzca con vanas promesas. No lo crean. Ningún Dios de ninguna nación o reino ha podido salvar a su pueblo de mi mano, ni de la mano de mis padres. ¡Cuánto menos podrán los dioses de ustedes librarlos de mi mano!» (2 Crónicas 32, 15)

  • Tú te mostraste justo en todo lo sucedido, porque tú has cumplido fielmente tus promesas, mas nosotros hemos actuado con maldad. (Nehemías 9, 33)

  • Yo aprendí desde niña, en mi familia, que tú, Señor, has elegido a Israel entre todas las naciones y a nuestros padres entre sus antepasados para que fueran por siempre tu heredad, y has cumplido con ellos tus promesas. (Ester 14, 5)

  • suprimir las promesas brotadas de tus labios, extirpar de raíz a tu heredad, (Ester 14, 9)

  • Desde la mañana oyes mi voz. Desde la mañana te hago promesas y me quedo a la espera. (Salmos 5, 4)

  • No me olvido, oh Dios, de mis promesas, te ofreceré sacrificios para darte gracias, (Salmos 56, 13)

  • Entonces cantaré por siempre a tu nombre y cumpliré mis promesas día tras día. (Salmos 61, 9)

  • En Sión, oh Dios, conviene alabarte y en Jerusalén cumplir nuestras promesas, (Salmos 65, 2)

  • cumpliré mis promesas al Señor en presencia de todo su pueblo. (Salmos 116, 14)


“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina