Números, 3
32. El jefe supremo de todos los levitas era Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, que tenía la supervisión de todos los que realizaban las tareas del Santuario.
32. El jefe supremo de todos los levitas era Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, que tenía la supervisión de todos los que realizaban las tareas del Santuario.
“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina