Daniel, 4
7. Yo contemplaba en mi lecho las visiones de mi imaginación: Vi un árbol gigantesco en el centro de la tierra.
7. Yo contemplaba en mi lecho las visiones de mi imaginación: Vi un árbol gigantesco en el centro de la tierra.
“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina