Proverbios, 30
9. no sea que, saciado, reniegue de ti y diga: "¿Quién es el Señor?"; o que, siendo pobre, robe y profane el nombre de mi Dios.
9. no sea que, saciado, reniegue de ti y diga: "¿Quién es el Señor?"; o que, siendo pobre, robe y profane el nombre de mi Dios.
“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina