7. Pero en cuanto llegaron al centro de la ciudad, Ismael, hijo de Netanías, y sus hombres los degollaron y los arrojaron en una cisterna.





“Que Nossa Mãe do Céu tenha piedade de nós e com um olhar maternal levante-nos, purifique-nos e eleve-nos a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina