Esdras, 7
27. ¡Bendito sea el Señor, Dios de nuestros padres, que tan bien dispuso el corazón del rey para glorificar el templo del Señor en Jerusalén,
27. ¡Bendito sea el Señor, Dios de nuestros padres, que tan bien dispuso el corazón del rey para glorificar el templo del Señor en Jerusalén,
“Quando o dia seguinte chegar, ele também será chamado de hoje e, então, você pensará nele. Tenha sempre muita confiança na Divina Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina