47. Una vez que Saúl asumió el poder real sobre Israel, hizo la guerra a todos sus enemigos de alrededor: a Moab, a los amonitas, a Edóm, a los reyes de Sobá y a los filisteos. Dondequiera que iba, salía victorioso.





“Deus nunca me recusou um pedido”. São Padre Pio de Pietrelcina