Gefunden 47 Ergebnisse für: diestra

  • Por eso alcanzarán el reino de la gloria y la bellísima diadema de mano del Señor. Porque con la diestra los protegerá, y como un escudo los cubrirá su brazo. (Sabiduría 5, 16)

  • Por esto los justos despojaron a los malvados, celebraron, Señor, tu nombre santo, y con corazón unánime alabaron tu diestra vencedora. (Sabiduría 10, 20)

  • Porque invocó al Señor altísimo, y éste dio fuerza a su diestra para matar a un poderoso guerrero y exaltar el poder de su pueblo. (Eclesiástico 47, 5)

  • no temas, porque yo estoy contigo; no te asustes, pues yo soy tu Dios. Yo te doy fuerza, soy tu auxilio y te sostengo con mi diestra victoriosa. (Isaías 41, 10)

  • Pues yo, el Señor, tu Dios, te cojo de la diestra y te digo: No temas, que yo vengo a ayudarte. (Isaías 41, 13)

  • El que se alimenta de ceniza, engañando el corazón, está perdido. No salvará su vida, y no dirá jamás: "¿No es un engaño lo que tengo en mi diestra?". (Isaías 44, 20)

  • Fue mi mano la que fundó la tierra, y mi diestra la que desplegó los cielos; los llamo yo, y todos a una se presentan. (Isaías 48, 13)

  • El Señor lo ha jurado por su diestra, por su potente brazo: No daré más tu grano como alimento a tus enemigos, ni extranjeros beberán más tu vino por el que te afanaste, (Isaías 62, 8)

  • Ha despedazado en el ardor de su ira todo el poder de Israel; ha retirado atrás su diestra, al acercarse al enemigo; ha encendido contra Jacob un fuego que todo lo devora. (Lamentaciones 2, 3)

  • Ha tensado su arco, cual si fuese enemigo, ha reforzado su diestra, como un adversario ha destrozado todo lo que era agradable a la vista; sobre las tiendas de Sión ha derramado su furor como fuego. (Lamentaciones 2, 4)

  • Otro tiene en su diestra espada y hacha, pero no puede defenderse de la guerra o de los ladrones. (Baruc 6, 13)

  • pero allí despedazaré el arco de tu mano izquierda y haré caer las flechas de tu diestra. (Ezequiel 39, 3)


“A maior alegria de um pai é que os filhos se amem, formem um só coração e uma só alma. Não fostes vós que me escolhestes, mas o pai celeste que, na minha primeira missa, me fez ver todos os filhos que me confiava”.(P.e Pio) São Padre Pio de Pietrelcina