Gefunden 458 Ergebnisse für: cosas

  • porque todo lo puso bajo sus pies. Pero cuando dice que todo le está sometido, está claro que exceptúa a Dios, que fue quien le sometió todas las cosas. (I Corintios 15, 27)

  • Cuando todo le esté sometido, entonces también el Hijo se someterá al Padre, que le sometió todo a él para que Dios sea todo en todas las cosas. (I Corintios 15, 28)

  • para los que no miramos las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las visibles son temporales, las invisibles eternas. (II Corintios 4, 18)

  • Por tercera vez estoy a punto de ir a veros, y tampoco seré una carga para vosotros; pues no busco vuestras cosas, sino a vosotros mismos. Porque no son los hijos los que deben ahorrar para los padres, sino los padres para los hijos. (II Corintios 12, 14)

  • Porque si reconstruyo las mismas cosas que destruí, demuestro que entonces fui culpable. (Gálatas 2, 18)

  • Estas cosas están dichas en sentido alegórico, pues estas mujeres representan dos alianzas; una, la del monte Sinaí, que engendra esclavos, y está representada en Agar. (Gálatas 4, 24)

  • Porque la carne lucha contra el espíritu, y el espíritu contra la carne; pues estas cosas están una frente a la otra para que no hagáis lo que queréis. (Gálatas 5, 17)

  • envidias, homicidios, borracheras, comilonas y cosas semejantes a éstas. Os advierto, como ya antes os advertí, que los que se entregan a estas cosas no heredarán el reino de Dios. (Gálatas 5, 21)

  • mansedumbre, continencia; contra estas cosas no hay ley. (Gálatas 5, 23)

  • cuando se cumpliera el tiempo: recapitular todas las cosas en Cristo, las de los cielos y las de la tierra. (Efesios 1, 10)

  • todo lo sometió bajo sus pies y a él lo constituyó cabeza de la Iglesia por encima de todas las cosas; (Efesios 1, 22)

  • de declarar el cumplimiento de este plan secreto, escondido desde todos los siglos en Dios, creador de todas las cosas. (Efesios 3, 9)


“Que o Espírito Santo guie a sua inteligência, faça-o descobrir a verdade escondida na Sagrada Escritura e inflame a sua vontade para praticá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina