Gefunden 351 Ergebnisse für: bajó

  • y el resto del ejército, bajo la dirección de su hermano Abisay, lo colocó frente a los amonitas. (II Samuel 10, 10)

  • David entró en su palacio, en Jerusalén. Y el rey tomó a las diez concubinas que había dejado para guardar el palacio y las puso bajo su guardia. Él proveyó a su sustento, pero no volvió a tener relaciones con ellas, y estuvieron encerradas, como viudas, hasta el día de su muerte. (II Samuel 20, 3)

  • Inclinó los cielos y bajó; una densa nube debajo de sus plantas. (II Samuel 22, 10)

  • Me ceñiste de fortaleza en la batalla, aplastaste bajo mis pies a mis agresores. (II Samuel 22, 40)

  • Benayas, hijo de Yehoyadá, hombre valiente y rico en hazañas, de Cabseel, fue el que mató a los dos héroes de Moab; fue también el que bajó a la cisterna y mató en ella a un león un día de nieve. (II Samuel 23, 20)

  • Ahí tienes a Semeí, hijo de Guerá, el benjaminita, de Bajurín, el que me lanzó atroces imprecaciones cuando yo iba a Majanayín; pero bajó a mi encuentro al Jordán y le juré por el Señor que no le mataría. (I Reyes 2, 8)

  • Baaná, hijo de Ajilud, en Tanac, Meguido y hasta más allá de Yocmeán; en todo Betsán, que está por bajo de Yezrael, desde Betsán hasta Abel Mejolá, junto a Sartán. (I Reyes 4, 12)

  • Israel y Judá vivieron tranquilos, cada uno bajo su parra y su higuera, desde Dan hasta Berseba, durante toda la vida de Salomón. (I Reyes 5, 5)

  • "Tú ya sabes cómo mi padre, David, no pudo construir la casa al nombre del Señor, su Dios, a causa de las guerras en que se vio envuelto, hasta que el Señor puso a sus enemigos bajo las plantas de sus pies. (I Reyes 5, 17)

  • Bajo el borde había alrededor de la pila una orla de coloquíntidas, diez por cada medio metro. Las hileras de coloquíntidas habían sido fundidas a la vez que la pila, (I Reyes 7, 24)

  • Los sacerdotes pusieron el arca de la alianza del Señor en el lugar santísimo del templo, bajo las alas de los querubines, (I Reyes 8, 6)

  • fue en seguimiento del hombre de Dios, y lo encontró sentado bajo un terebinto. "¿Eres tú -le dijo- el hombre de Dios que ha llegado de Judá?". "Yo soy", respondió. (I Reyes 13, 14)


“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina