Gefunden 173 Ergebnisse für: algunos

  • Pero como algunos se obstinaban en no creer y desacreditaban el camino del Señor ante la gente, se apartó de ellos, hizo un grupo aparte con los discípulos y se puso a enseñar diariamente en la escuela de Tirano. (Hechos 19, 9)

  • Algunos exorcistas judíos ambulantes intentaron también invocar el nombre de Jesús, el Señor, sobre los que estaban poseídos por espíritus malignos, diciendo: "Os conjuro por Jesús, a quien Pablo predica". (Hechos 19, 13)

  • Algunos judíos empujaron a Alejandro para que hablara a la gente, y Alejandro hizo señal con la mano de que quería hablar al pueblo. (Hechos 19, 33)

  • Fueron también con nosotros algunos discípulos de Cesarea, y nos llevaron a casa de un tal Nasón, chipriota, antiguo discípulo, donde debíamos hospedarnos. (Hechos 21, 16)

  • Se produjo un gran alboroto. Algunos maestros de la ley de la parte de los fariseos se levantaron y afirmaron enérgicamente: "Nosotros no encontramos nada malo en este hombre. ¿Y si le ha hablado un espíritu o un ángel?". (Hechos 23, 9)

  • Cinco días más tarde, el sumo sacerdote Ananías llegó a Cesarea con algunos ancianos y un tal Tértulo, abogado, y presentaron acusación ante el gobernador contra Pablo. (Hechos 24, 1)

  • Cuando se decidió que embarcásemos para Italia, entregaron a Pablo y algunos otros presos a un oficial de la legión Augusta, llamado Julio. (Hechos 27, 1)

  • No importa que algunos fueran infieles. ¿Es que su infidelidad va a anular la fidelidad de Dios? (Romanos 3, 3)

  • Entonces, ¿por qué -como se nos calumnia y como afirman algunos que decimos nosotros- no hemos de hacer el mal para que venga el bien? La condenación de éstos es justa. (Romanos 3, 8)

  • por ver si a los de mi raza les entra envidia y logro salvar a algunos de ellos. (Romanos 11, 14)

  • Algunos se han llenado de orgullo pensando que no volveré a veros. (I Corintios 4, 18)

  • Eso erais antes algunos; pero habéis sido lavados, consagrados y justificados en el nombre de nuestro Señor Jesucristo y en el Espíritu de nuestro Dios. (I Corintios 6, 11)


“Não queremos aceitar o fato de que o sofrimento é necessário para nossa alma e de que a cruz deve ser o nosso pão cotidiano. Assim como o corpo precisa ser nutrido, também a alma precisa da cruz, dia a dia, para purificá-la e desapegá-la das coisas terrenas. Não queremos entender que Deus não quer e não pode salvar-nos nem santificar-nos sem a cruz. Quanto mais Ele chama uma alma a Si, mais a santifica por meio da cruz.” São Padre Pio de Pietrelcina