Gefunden 163 Ergebnisse für: Piedras

  • tomó doce piedras, una por cada tribu de los hijos de Jacob, a quien había dicho: "Te llamarán Israel", (I Reyes 18, 31)

  • Entonces cayó fuego del Señor y devoró el holocausto, la leña, las piedras y el polvo y secó el agua de la zanja. (I Reyes 18, 38)

  • Miró en derredor, y vio a su cabecera una torta cocida sobre piedras ardiendo y un vaso de agua. Comió, bebió y luego se volvió a acostar. (I Reyes 19, 6)

  • Destruiréis todas las ciudades amuralladas, talaréis todos los árboles frutales, cegaréis todos los manantiales de agua y devastaréis con piedras todos los mejores campos". (II Reyes 3, 19)

  • Demolieron las ciudades y llenaron de piedras los campos fértiles; cegaron todos los manantiales de agua y talaron todos los árboles frutales, hasta que no quedó más que Quir Jareset. Los honderos la cercaron y la atacaron. (II Reyes 3, 25)

  • a los albañiles y a los canteros, para comprar maderas y piedras talladas con que reparar los desperfectos del templo del Señor, y para todo lo que se gastase en el templo en reparaciones. (II Reyes 12, 13)

  • El rey Acaz arrancó también los paneles de las basas, quitó los aguamaniles y la gran pila de encima de los toros de bronce que lo sostenían, y lo asentó sobre un zócalo de piedras. (II Reyes 16, 17)

  • han echado sus dioses al fuego, porque no eran dioses, sino hechura de manos de hombres, leños o piedras; y por eso los han podido destruir. (II Reyes 19, 18)

  • carpinteros, maestros de obras y albañiles, y para comprar maderas y piedras talladas con que reparar el templo. (II Reyes 22, 6)

  • Destruyó el altar que había en Betel, y el santuario que había construido Jeroboán, hijo de Nabat, el que había inducido a Israel a pecar; hizo pedazos sus piedras, reduciéndolas a polvo, y quemó el cipo sagrado. (II Reyes 23, 15)

  • arqueros hábiles en lanzar piedras y flechas lo mismo con la derecha que con la izquierda. Entre los hermanos de Saúl, de la tribu de Benjamín: (I Crónicas 12, 2)

  • David ordenó que se reunieran todos los extranjeros que había en Israel, y los empleó como canteros en labrar piedras para la construcción de la casa de Dios. (I Crónicas 22, 2)


“Amemos ao próximo. Custa tão pouco querer bem ao outro.” São Padre Pio de Pietrelcina