Gefunden 701 Ergebnisse für: Allí

  • ofrecerás sacrificios de reconciliación y allí comerás y te regocijarás ante el Señor, tu Dios. (Deuteronomio 27, 7)

  • El Señor te hará ir a ti y al rey que hayas constituido sobre ti a una nación desconocida para ti y para tus padres, y allí servirás a dioses extranjeros, hechos de leño y de piedra, (Deuteronomio 28, 36)

  • El Señor te dispersará entre todos los pueblos, de uno a otro extremo de la tierra, y allí serviréis a otros dioses de madera y de piedra desconocidos de ti y de tus padres. (Deuteronomio 28, 64)

  • El Señor te llevará de nuevo a Egipto por el camino del que yo te había dicho: No lo volverás a ver más. Allí os ofreceréis a vuestros enemigos en venta como esclavos y no encontraréis comprador. (Deuteronomio 28, 68)

  • Aunque tus desterrados estuvieran en el confín del cielo, de allí iría a buscarte (Deuteronomio 30, 4)

  • "Tomad este libro de la ley y ponedlo al lado del arca de la alianza del Señor, vuestro Dios; que esté allí como testimonio contra ti, (Deuteronomio 31, 26)

  • Moisés, siervo de Dios, murió allí, en la tierra de Moab, como lo había dispuesto el Señor. (Deuteronomio 34, 5)

  • Josué, hijo de Nun, envió secretamente desde Sittín dos espías con esta consigna: "Id a explorar la tierra de Jericó". Ellos fueron y entraron en casa de una prostituta llamada Rajab, y se alojaron allí. (Josué 2, 1)

  • Pero ella los había hecho subir a la azotea y los había escondido entre las cañas de lino que tenía allí. (Josué 2, 6)

  • Y les dijo: "Id hacia la montaña, para que no os encuentren los que os persiguen; estad escondidos allí durante tres días, hasta que ellos regresen, y luego seguid vuestro camino". (Josué 2, 16)

  • Ellos se fueron, llegaron a la montaña y estuvieron allí tres días, hasta que volvieron sus perseguidores, que los estuvieron buscando por todas partes y no los encontraron. (Josué 2, 22)

  • Josué se levantó de madrugada, partió de Sittín con todos los israelitas y llegaron hasta el Jordán. Allí acamparon antes de atravesarlo. (Josué 3, 1)


“A pessoa que nunca medita é como alguém que nunca se olha no espelho e, assim, não se cuida e sai desarrumada. A pessoa que medita e dirige seus pensamentos a Deus, que é o espelho de sua alma, procura conhecer seus defeitos, tenta corrigi-los, modera seus impulsos e põe em ordem sua consciência.” São Padre Pio de Pietrelcina