Gefunden 52 Ergebnisse für: vestiduras sacerdotales

  • «Toma a Aarón y con él a sus hijos, y también las vestiduras, el óleo de la unción, el novillo para el sacrificio por el pecado, los dos carneros y el canastillo de los ázimos; (Levítico 8, 2)

  • Después Moisés tomó óleo de la unción y sangre de la que había encima del altar, roció a Aarón y sus vestiduras de sus hijos. Así consagró a Aarón y sus vestiduras, así como a sus hijos y las vestiduras de sus hijos. (Levítico 8, 30)

  • Se vestirá con la túnica sagrada de lino, se pondrá los calzones de lino, se ceñirá la faja de lino y se cubrirá con la tiara de lino. Estas son las vestiduras sagradas que vestirás después de haberse lavado con agua. (Levítico 16, 4)

  • Luego entrará Aarón en la Tienda del Encuentro y, despojándose de las vestiduras de lino con que se había vestido al entrar en el santuario, las dejará allí; (Levítico 16, 23)

  • lavará su cuerpo con agua en lugar sagrado y se pondrá sus vestiduras. Después saldrá y ofrecerá su holocausto y el holocausto del pueblo, hará la expiación por sí mismo y por el pueblo, (Levítico 16, 24)

  • Hará la expiación el sacerdote ungido y de manos consagradas para ejercer el sacerdocio como sucesor de su padre: él se vestirá las vestiduras de lino, las vestiduras sagradas, (Levítico 16, 32)

  • A Aarón y a sus hijos los alistarás para que se encarguen de sus funciones sacerdotales. El laico que se acerque, será muerto.» (Números 3, 10)

  • Pero Josué, hijo de Nun, y Caleb, hijo de Yefunné, que eran de los que habían explorado el país, rasgaron sus vestiduras (Números 14, 6)

  • Le quitarás a Aarón sus vestiduras y se las pondrás a su hijo Eleazar. Entonces Aarón se reunirá con los suyos: allí morirá.» (Números 20, 26)

  • Quitó Moisés a Aarón sus vestiduras y se las puso a su hijo Eleazar. Y murió allí Aarón, en la cumbre del monte. Moisés y Eleazar bajaron de la montaña. (Números 20, 28)

  • Al verla, rasgó sus vestiduras y gritó: «¡Ay, hija mía! ¡Me has destrozado! ¿Habías de ser tú la causa de mi desgracia? Abrí la boca ante Yahveh y no puedo volverme atrás.» (Jueces 11, 35)

  • Cuando el rey oyó las palabras del libro de la Ley rasgó sus vestiduras. (II Reyes 22, 11)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina