Gefunden 202 Ergebnisse für: fruto del vientre

  • «A su debido tiempo, envió un siervo a los labradores, para que le diesen parte del fruto de la viña. Pero los labradores, después de golpearle, le despacharon con las manos vacías. (Lucas 20, 10)

  • el segador recibe el salario, y recoge fruto para vida eterna, de modo que el sembrador se alegra igual que el segador. (Juan 4, 36)

  • En verdad, en verdad os digo: si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda él solo; pero si muere, da mucho fruto. (Juan 12, 24)

  • Todo sarmiento que en mí no da fruto, lo corta, y todo el que da fruto, lo limpia, para que dé más fruto. (Juan 15, 2)

  • Permaneced en mí, como yo en vosotros. Lo mismo que el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid; así tampoco vosotros si no permanecéis en mí. (Juan 15, 4)

  • Yo soy la vid; vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada. (Juan 15, 5)

  • La gloria de mi Padre está en que deis mucho fruto, y seáis mis discípulos. (Juan 15, 8)

  • No me habéis elegido vosotros a mí, sino que yo os he elegido a vosotros, y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y que vuestro fruto permanezca; de modo que todo lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo conceda. (Juan 15, 16)

  • Pues no quiero que ignoréis, hermanos, las muchas veces que me propuse ir a vosotros - pero hasta el presente me he visto impedido - con la intención de recoger también entre vosotros algún fruto, al igual que entre los demás gentiles. (Romanos 1, 13)

  • Así que, una vez terminado este asunto, y entregado oficialmente el fruto de la colecta, partiré para España, pasando por vosotros. (Romanos 15, 28)

  • pues esos tales no sirven a nuestro Señor Jesucristo, sino a su propio vientre, y, por medio de suaves palabras y lisonjas, seducen los corazones de los sencillos. (Romanos 16, 18)

  • La comida para el vientre y el vientre para la comida. Mas lo uno y lo otro destruirá Dios. Pero el cuerpo no es para la fornicación, sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo. (I Corintios 6, 13)


“Deus é servido apenas quando é servido de acordo com a Sua vontade.” São Padre Pio de Pietrelcina