Gefunden 831 Ergebnisse für: dioses de Egipto

  • No había pan en todo el país, porque el hambre era gravísima y tanto Egipto como Canaán estaban muertos de hambre. (Génesis 47, 13)

  • Entonces José se hizo con toda la plata existente en Egipto y Canaán a cambio del grano que ellos compraban, y llevó José aquella plata al palacio de Faraón. (Génesis 47, 14)

  • Agotada la plata de Egipto y de Canaán, acudió Egipto en masa a José diciendo: «Danos pan. ¿Por qué hemos de morir en tu presencia ahora que se ha agotado la plata?» (Génesis 47, 15)

  • De este modo se apropió José todo el suelo de Egipto para Faraón, pues los egipcios vendieron cada uno su campo porque el hambre les apretaba, y la tierra vino a ser de Faraón. (Génesis 47, 20)

  • En cuanto al pueblo, lo redujo a servidumbre, de cabo a cabo de las fronteras de Egipto. (Génesis 47, 21)

  • Israel residió en Egipto, en el país de Gosen; se afincaron en él y fueron fecundos y se multiplicaron sobremanera. (Génesis 47, 27)

  • Jacob vivió en Egipto diecísiete años, siendo los días de Jacob, los años de su vida, 147 años. (Génesis 47, 28)

  • Cuando los días de Israel tocaron a su fin, llamó a su hijo José y le dijo: «Si he hallado gracia a tus ojos, pon tu mano debajo de mi muslo y hazme este favor y lealtad: No me sepultes en Egipto. (Génesis 47, 29)

  • Cuando yo me acueste con mis padres, me llevarás de Egipto y me sepultarás en el sepulcro de ellos.» Respondió: «Yo haré según tu palabra.» - (Génesis 47, 30)

  • Pues bien, los dos hijos tuyos que te nacieron en Egipto antes de venir yo a Egipto a reunirme contigo, míos son: Efraím y Manasés, igual que Rubén y Simeón, serán míos. (Génesis 48, 5)

  • Subió José a enterrar a su padre, y con él subieron todos los servidores de Faraón, los más viejos de palacio, y todos los ancianos de Egipto, (Génesis 50, 7)

  • Regresó José a Egipto con sus hermanos, y todos cuantos habían subido con él a sepultar a su padre. (Génesis 50, 14)


“Façamos o bem, enquanto temos tempo à nossa disposição. Assim, daremos glória ao nosso Pai celeste, santificaremos nós mesmos e daremos bom exemplo aos outros.” São Padre Pio de Pietrelcina